martes, 25 de agosto de 2009

Reflexiones de una tarde de Otoño

29/03/2009
Nuevamente son las 18:30 hrs de la tarde
Nuevamente me hayo sumergida en mis pensamientos
sentada en la escalera de la entrada de mi edificio
Deleitándome con ver ocultarse un nuevo
día, como cae el sol en esta tarde las primeras
tardes de otoño.

Se me hace difícil escapar a este placer que repito
día a día, pero cada atardecer es distinto porque
cada día es distinto, es nuevo, es único.
Espero no repetir las mismas palabras día a día.

Cada día tiene un sabor distinto, huele distinto,
se siente distinto.
Cada día son distintas las personas que pasan, los
autos, los niños...
Confieso que me gustaría ser cada uno de ellos por
un día, para llegar a saber o comprender que pasa en
cada una de sus vidas, que se siente ser ellos, que
piensan, por qué van donde van...

A veces me gustaría tener el poder de ir uniendo casualidades
que me condujeran hacia algo mágico, algo inesperado
o esperado inconscientemente.

Es el arte de la vida, de unir matices, de unir vida
experiencias, colores logrando la plenitud de la
existencia humana

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